martes, 16 de noviembre de 2010

El Pibe: Sexo a domicilio (1)




Mika y yo nos miramos de frente, en silencio; desde hace varios minutos. Quiere jugar tal vez. Yo miro hacia la ventana. Se acerca un poco a donde estoy y la ignoro. Se acerca un poco más. Sigo indiferente. Ni se te ocurra, pienso. Busco en mi bolso algo con qué entretenerla y con un par de notas del supermercado le hago una bolita de papel que le aviento lejos para distraerla. Sin caer en la trampa, avanza un par pasos con cuidado, hacia mí. Si estiro una mano podría tocarla, pero eso no va a ocurrir y ella lo sabe.

En ese momento, la puerta del baño se abre y El Pibe sale con el torso desnudo magnífico, donde le brillan todavía un millón de gotitas de agua. Se cuelga la toalla en los hombros y me sonríe.

-¿No es divina? – dice.

-¿La gata?

-¿No te encanta?

-Si, muy linda. ¿Sabes que pensé en traerle un ratón?

-¿Cómo un ratón? –pregunta perplejo, sin entender.

-Si, de esos que venden en las tiendas de mascotas. Lo pensé porque estaría bueno verla jugar con un ratón de verdad, ¿no? A los gatos les gustan los ratones.

-Pero lo va a matar en dos segundos, Maja. – Me mira levemente horrorizado.

-Pues si, de eso se trata, ¿no?

-Sos macabra.

-¡Ja! ¿Me vas a cocinar? – le pregunto al tiempo que me incorporo y me acerco hasta alcanzarle un hombro con la boca.

-¿Me vas a ayudar?

-Por supuesto que no.

-Sos una princesa.

-Te recuerdo que está discusión ya la tuvimos alguna vez…

-¿No me podés ayudar, al menos llevando tu plato a la mesa?

-No Pibe lindo. Yo soy la que atraviesa la ciudad en auto. A veces con tráfico. Tú en cambio,  sólo tienes que abrir la puerta para tener sexo a domicilio. Lo justo es que cocines y no te quejes. Y yo te beso ¿te late?

-Dale.

-¿Me vas a cocinar?

-Te voy a coger hasta que pidas esquina.

Mi boca se hace besos en la suya. La toalla que le cubría los hombros sale volando; un maullido muy leve me dice que la pobre Mika ha quedado debajo. 

Tenemos la tarde infinita por delante y me da mucho gusto y gozo, estar aquí.

5 comentarios:

  1. Uy, pues como que sí se antoja el momento. Ese Pibe como que lo odiamos y lo amamos jeje

    Lo del ratón que bueno no lo compraste, pobrecito. Los gatos son los únicos animales que matan por diversión... a parte de los humanos, claro.

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  2. Jajaja!
    Es que un felino en cacería me parece realmente bello....
    Y la historia con El Pibe sigue... y así. ; )
    Gracias por pasar!

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  3. P:
    El Pibe se lleva mis aplausos, por constante e insistente, es el único que sabe llevarte y tenerte un extasis (por el momento).

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  4. ayyy esas gotitas en el cuerpo Maja!! y kien pensaria k era El Pibe??? como te agarro la cabeza, para mi k ya te rendiste a el.. Un besote amiga!

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  5. P;
    Le daremos un premio?
    Renatta:
    Sólo a veces, me rindo. ; )

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